jueves, octubre 02, 2008

Coincidencias...

Decía Bryce: Simple y llanamente la vida es la vida. Que uno pocas veces elige dónde o con quién quiere estar y que el tiempo es una especie de capricho y a veces eso es difícil de aceptar. Y es que hay personas en la vida que pueden tenerlo todo... Todo menos ese "ETA" (Estimated time of arrival) del que tanto habla Bryce en su novela "La amigdalitis de Trazán", de manera absolutamente irónica, pero también absolutamente cierta. Y, lección difícil de aprender.
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Imagino que la mayoría de nosotros vio la genial peli "La era de hielo", donde Mani, (el mamut), muy irritado, cansado y aburrido de Cid (no sé qué animal es), porque es muy absorbente, espeso, quisquilloso y poco delicado y andaba coqueteando con una y otra, le dice: "CUANDO UNO ENCUENTRA PAREJA HAY QUE SERLE FIEL, Y EN TU CASO, DEBERÍAS ESTAR AGRADECIDO". En aquel momento sólo me hizo gracia, no lo entendí muy bien y creo que ahora es cuando lo pienso mejor. Una “pareja”, “amante”. . . o como quieran llamarlo, espera LEALTAD, ayuda mutua, amistad, amor, pasión, soporte mutuo, FIDELIDAD, comprensión, dedicación generosa, protección y etc. . . Sin embargo, conforme avanza la “relación”. . . defraudamos esas esperanzas, decepcionamos las expectativas e incumplimos las promesas que hacemos implícitamente por el sólo hecho de estar juntos.

Jamás entenderé ciertas situaciones de la vida. . . ¿Serán así las relaciones?. . . nunca coincides con la persona que podría ser tu complemento ideal. . . y sin embargo, el azar te hace coincidir con personas que tú crees que son buenas. . . que valen la pena arriesgar e hipotecar tu libertad y dignidad a cambio de casi nada. . . personas en las que piensas que puedes depositar tu confianza. . . pero, un mal comportamiento, una palabra a destiempo, una frase que nunca debiste decir, una mirada helada y cosas como esas, pueden romper una hermosa relación. . . así es de frágil es el amor. . . cuando menos lo esperas y cuanto más confías. . . PECAN DE PALABRA, OBRA U OMISIÓN y te decepcionan. . .

Y en este caso, creo que “yo soy Cid”, el chinchoso animalito que aburre a “Mani”, porque debo estar agradecida por lo que tengo a mi lado. Hipotecar mi libertad y someter mi dignidad vale la pena porque él lo merece todo. Esas miraditas casi heladas que quieren salir de sus ojitos cuando se molesta, esa manía de morderse las uñas cuando está nervioso, esos temblores en su carita cuando no quiere escuchar un adios, esos llantos exagerados en las discusiones, esos celitos desmedidos hasta de mi sombra, esos mensajitos de “te quieros apasionados”, esos 50 años prometidos para estar juntos y esos “te amos” sin mezquindad alguna.

Sí… debería estar agradecida… ¡y lo estoy!, porque he coincidido contigo… “mi alma gemela” ^_^